sábado, 29 de diciembre de 2007

Rara navidad

Hola,
Pues, eso. Están siendo unas Navidades de lo más raras. No he enviado más que una felicitación
de Navidad, estoy cansado y como desanimado, no tengo (casi) ni puta idea de qué regalar.

Creo que no es sólo el trabajo. El trabajo me haría efecto si volviera cada noche a las 23:00 a casa, pero no es el caso: no estoy volviendo muy tarde. Es cierto que me está pillando el toro con algunas cosas del curro, pero no sé, no creo que sea suficiente para justificar mi estado.

Igual es que ya estoy harto de la navidad. Igual es que necesito cosas nuevas. Hoy he estado en el C. C. Plenilunio. Hala, todo cristo comprando de todo, a toda velocidad. Todo el mundo en masa llenando esos sitios.

Todo el mundo llenándose los buzones de powerpoints con papanoeles y elfos y navidades yupiyupi hey. Me siento como fuera de lugar un poco. La Navidad pertenece a los niños.

Me siento cansado y con ganas de hacer pocas cosas.

Tengo propósitos de año nuevo, otra chorrada que casi nunca se cumple, pero que paradójicamente es una de las pocas cosas que me animan. Quiero cambios en este próximo año. Muchos cambios. No dependen todos de mí, por supuesto, pero voy a ayudar en todo lo que pueda.

1 comentario:

morgana dijo...

Joooooo. Espero que tus ánimos mejoren, que ya queda menos para que todo este rollo consumista y de felicidad a la fuerza en que se ha convertido la Navidad se acabe. A mí me encantaba hasta hace no mucho pero se está convirtiendo en una pesadilla para el bolsillo y para el estómago. ¿No podemos quedar con la gente a la que apreciamos sin tener que cebarnos hasta el límite?

Supongo que en nuestras manos está el cambiar eso.

Hare Krisnas anajapinuyiar.